2 de septiembre de 2019
25 de agosto de 2019
9 de agosto de 2019
para darle la razón
a los horóscopos.
Todos los pronósticos
cuajaron a la perfección con vos.
Cada descripción
era una evidencia.
Cada vaticinio,
una réplica exacta
(tu viva imagen).
Cada predicción,
un inventario de todas tus singularidades,
un mapeo inequívoco de
lo que nunca acertaba.
Y yo,
que nunca los había
tomado en serio,
que me había reído de ellos
en su propia cara,
tuve que empezar
a prestarles atención.
Nunca un signo del zodíaco
se había atrevido a tanto.
21 de julio de 2019
Nunca entendí
esa manera críptica
que tenías de comunicarte.
Ese modo
de pedir las cosas
con un lenguaje tan incomprensible
y al mismo tiempo tan exacerbado.
Esa obstinación
por plantarme tantas inseguridades.
Tendrías que haber visto
el empeño que ponías
para no nombrarme.
Como si el simple hecho
de no nombrarme
me convirtiera en algo
irreal,
ficticio,
imaginario.
O me transmutara en algo
que al menos no doliera tanto.
esa manera críptica
que tenías de comunicarte.
Ese modo
de pedir las cosas
con un lenguaje tan incomprensible
y al mismo tiempo tan exacerbado.
Esa obstinación
por plantarme tantas inseguridades.
Tendrías que haber visto
el empeño que ponías
para no nombrarme.
Como si el simple hecho
de no nombrarme
me convirtiera en algo
irreal,
ficticio,
imaginario.
O me transmutara en algo
que al menos no doliera tanto.
1 de julio de 2019
21 de mayo de 2019
(Pintura: Lohmuller Gyuri) |
los gestos,
las caras,
el andar.
Se vuelve incierto
el futuro,
tus manos,
mis miedos.
Se tornan imprecisos
los sueños,
la acera,
lo cotidiano.
La única certeza,
la más antigua de todas,
pende de un hilo a punto de cortarse.
¿Será la muerte
el final de todo?
1 de abril de 2019
El error estuvo en suponer
que había un mecanismo de defensa,
allí donde no había nada.
Un muro de Berlín imaginario
que protegía todas tus inseguridades.
Un puente levadizo que se elevaba
cada vez que intentaba acercarme.
El error estuvo en imaginar
que te encontraría agazapado
detrás de esas murallas,
esperando a alguien
que viniera a rescatarte.
Pero derribado el muro
y vencidas tus inestabilidades
sólo encontré vacío
y un abismo de silencio
que no hacía más que confirmar
lo que yo ya sospechaba:
nunca iba a encontrarte.
Porque jamás estuviste ahí,
donde yo te había colocado.
que había un mecanismo de defensa,
allí donde no había nada.
Un muro de Berlín imaginario
que protegía todas tus inseguridades.
Un puente levadizo que se elevaba
cada vez que intentaba acercarme.
El error estuvo en imaginar
que te encontraría agazapado
detrás de esas murallas,
esperando a alguien
que viniera a rescatarte.
Pero derribado el muro
y vencidas tus inestabilidades
sólo encontré vacío
y un abismo de silencio
que no hacía más que confirmar
lo que yo ya sospechaba:
nunca iba a encontrarte.
Porque jamás estuviste ahí,
donde yo te había colocado.
15 de marzo de 2019
19 de febrero de 2019
Hoy,
que nos hemos dejado,
todas las cosas han quedado
suspendidas en el aire.
Como partículas de polvo
vistas a trasluz
en una siesta de invierno.
Todo pasa flotando
en cámara lenta,
pendiendo de un hilo invisible:
Las compras,
la tintorería,
los niños,
las promesas
que me hiciste
(íbamos a ser felices,
¿lo olvidaste?).
Como si el tiempo
se hubiese congelado.
Como si la tierra se hubiese
detenido de repente
(para siempre).
que nos hemos dejado,
todas las cosas han quedado
suspendidas en el aire.
Como partículas de polvo
vistas a trasluz
en una siesta de invierno.
Todo pasa flotando
en cámara lenta,
pendiendo de un hilo invisible:
Las compras,
la tintorería,
los niños,
las promesas
que me hiciste
(íbamos a ser felices,
¿lo olvidaste?).
Como si el tiempo
se hubiese congelado.
Como si la tierra se hubiese
detenido de repente
(para siempre).
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- Guillermina Delupi
- Córdoba, Córdoba, Argentina
- Guillermina Delupi© nació en San Luis en 1975. Actualmente vive en Córdoba. En 2011 participó del Primer Certamen de Ensayos "Las Nuestras. Mujeres que hicieron historia en Córdoba" y su ensayo fue publicado en un libro que reunió los relatos ganadores. En diciembre de ese año La Central, revista cordobesa de cultura, publicó su relato: "El hacedor de pollitos de colores". El diario Los Andes (Mendoza) publicó en 2012 el cuento "Noticia de una muerte" y en diciembre de 2013 la revista Rumbos digital publicó su relato "Las mujeres de mi familia". En 2014, la editorial Dunken incluyó su poema "De una vez" en la compilación "Letras del Face 3" y seleccionó “El hacedor de pollitos de colores” para integrar el libro de cuentos “Viajá conmigo”. En junio de 2014 ganó el 3° premio en el certamen literario nacional Paco Urondo y en septiembre Marcel Maidana Ediciones editó su eBook: “Fantasmas de otros”. En junio de 2019, su primer recital de poesía recibió un beneplácito del Concejo Deliberante de Córdoba por su aporte a la cultura. Ah, su amiga Emma Gunst (emmagunst.blogspot.com.ar) publicó tres de sus poemas en el blog que reúne a mujeres poetas de todo el mundo y de todos los tiempos.