20 de noviembre de 2023

Fiesta


Engalané tu casa

con pinceles y formas

porque vos

engalanas la mía

cada día

con perfumes y colores.


11 de octubre de 2023

Imagining his dream*

Most of the cities were in ruins when we arrived.
The further north we went
devastation showed the face of horror
in the prominent clavicles of pale children
in the empty looks of the older,
in the barren lands, the dry lakes and the confused animals.

I felt like a tourist in my own latitudes
unable to understand what was happening.
Somebody talked about going South
where the land flourished, the lakes spilled
and the children were tangled frolicking with the animals.

We found a man sitting at the entrance of the prosperous village
He had an imperturbable look and his eyes were set beyond our visual limits.
He seemed oblivious to the voracious stain that was devouring the entire planet,
leaving it wiht only a few weak vital signs.

There was no need to ask him anything
a single gesture of his was enough to understand
that everything we looked at in ecstasy
it was there simply because he had dreamed it so. 

*Poema publicado en la revista International Gallerie, dirigida por Bina Sarkar Ellias (India). 



1 de junio de 2023

Los perros de la tristeza


Casas apiñadas
que la mano de un dios
arrojó con desprecio
sobre cerros empobrecidos

se enciman una tras otra
y crecen infinitas
entre escaleras deformes
que se elevan hacia la nada.

En las pendientes, los perros de la tristeza
duermen amarrados
por sus dueños
a algún poste o alambrado

como si les fuera posible
escapar de tanta miseria. 

12 de mayo de 2021

El ahogado

A partir de allí
todo fue una sucesión
de desencuentros interminables.
El mar yacía sobre la mesita de luz
con olas que iban y venían silenciosas
ahogando libros y anotaciones.
Frases sueltas de poemas viejos
flotaron inútilmente
buscando rearmarse.
El agua acabó
por inundar la habitación entera
llevándoselo todo: 
los años,
las caricias,
los silencios,
los lápices,
las flores
y unos manotazos desesperados
dibujados para nadie
en el medio del naufragio.

2 de marzo de 2021

Lógica pura

Me paro en el vértice que divide los vasos:
los medio llenos, de los medio vacíos
y juego a que en algún lugar del universo
todo es siempre posible.

Estadísticamente hablando
las probabilidades de que vos leas este poema
son las mismas de que yo no lo haya escrito nunca.

Y sin embargo lo escribo.

Como en la paradoja del gato de Schrödinger
vivo y muero al mismo tiempo
sin una conciencia que me observe.

Todo es cuestión de cálculo: 

si no es hoy será mañana,
si no es aquí será allá,
si no es con vos
metete igual.

Es lógica pura:

las matemáticas y yo
siempre tuvimos
nuestras diferencias. 

20 de octubre de 2020

Te dije:
esta soy yo
en mi versión de domingo.
Miraste de reojo
mis pantalones anchos,
mi pelo desprolijo,
mis facciones sin maquillaje.
Me sentí
una calle vacía
en plena madrugada;
desnuda y muerta de frío.
Me volví a verte
y te reté desde mi ceño fruncido.
Busqué mi mejor abrigo de lana
(aún el pelo desprolijo,
todavía la cara despintada)
y salí a abrazar el invierno
que tus gestos habían desatado. 


31 de julio de 2020

Hay algo del orden 
de lo estático
de lo inmóvil
de lo incierto
que nos perturba
nos aturde,
desestructura 
nuestras zonas más primitivas.
El tiempo se ha detenido
el espacio nos cerca.
El cuerpo es una jaula
¿quiénes somos?
¿qué anhelamos?
Habitamos en burbujas del no-tiempo,
el lenguaje es un límite
sus bordes, la conciencia. 
Rutinas vacías,
tiempo muerto,
en espera.
Hastiados de nada,
ciegos 
frente a un planeta
que nos expele
por nuestro propio mérito. 

19 de mayo de 2020

Me gustabas
porque usabas palabras como
bragas,
jersey,
sostén
y olías a adrenalina.

Porque no tenías dobleces,
no se le veían costuras a tus modales
y las palabras se te escapaban a borbotones
cuando corrías atrás de alguna idea fantástica.

Porque andabas siempre
jugando a algún juego
y me arrastrabas a ese terreno lúdico
que yo había olvidado casi por completo.
 
Porque usabas la palabra magia
con la misma naturalidad
con la que se dicen
las palabras cotidianas. 

Por eso.
Y porque hacías que la palabra coger
no me escandalizara.

9 de abril de 2020

Jugábamos a cambiar el mundo
y el mundo acabó jugándonos a nosotros.
La certeza de la muerte
estaba en un futuro inalcanzable
y la vida
-como un hechizo inescrutable-
duraría para siempre.
Pero el espejo
se hizo trizas
y la razón nos encontró
haciendo malabares
con nuestras certidumbres más oscuras.
Nos apuramos
a sacar las penumbras al sol
para que el aire fresco las filtrara.
Y le vimos la luz a las heridas,
saboreamos el lado dulzón de la amargura,
encontramos paz en el desconsuelo.
Y aliviados, escupimos la saliva
que nos deglutía el cuerpo.
La vida dejó de vivirnos
y nos devolvió todas las cartas.
No las vimos, ya era tarde.
El mundo entero se dio vuelta
sólo para darnos la espalda.
Y ya no hubo manera de salvarnos.

21 de marzo de 2020

No se planean

No se planean.
Las cosas simplemente suceden.
Conocerte un poco más.
Reencontrarte con ese otro
del que te habías estado perdiendo.
Un sacudón te devuelve la perspectiva.
Y ahí estás,
preguntándotelo todo una vez más.
Nada se planea.
Todo estuvo siempre decidido.
En un futuro no muy lejano
esto ya sucedió.
Sí, los adioses también.

18 de marzo de 2020

Hoy me deshice
de la última fotografía tuya
que me quedaba.
Pero no fue un acto
de belicosidad,
de bronca,
de enojo,
de ira,
de rabia,
de cólera.
Fue más bien
un gesto de ternura,
de amor,
de cariño.
Tal vez el último acto
de condescendencia
que me atreví a tener
en tu nombre.
Como quien acaricia
la cabeza de un niño
al que acaba de quitarle
su juguete más preciado
y le dice:
“ya pasará, cariño,
ya pasará”.

2 de marzo de 2020

Te extraño condenadamente.
No tengo dónde poner
las cosas que ya no podré contarte.
Ni los chistes malos
de los que nos reíamos
como niños,
ni las canciones viejas
que pasan por la radio,
ni las tonterías
que se empeñan en decirme a la cara. 
A quién le doy los buenos días,
las buenas noches,
las buenas nuevas,
las tantas ganas.
A quién,
si aquí no ha quedado nadie.

Mi foto
Córdoba, Córdoba, Argentina
Guillermina Delupi© nació en San Luis en 1975. Actualmente vive en Córdoba. En 2011 participó del Primer Certamen de Ensayos "Las Nuestras. Mujeres que hicieron historia en Córdoba" y su ensayo fue publicado en un libro que reunió los relatos ganadores. En diciembre de ese año La Central, revista cordobesa de cultura, publicó su relato: "El hacedor de pollitos de colores". El diario Los Andes (Mendoza) publicó en 2012 el cuento "Noticia de una muerte" y en diciembre de 2013 la revista Rumbos digital publicó su relato "Las mujeres de mi familia". En 2014, la editorial Dunken incluyó su poema "De una vez" en la compilación "Letras del Face 3" y seleccionó “El hacedor de pollitos de colores” para integrar el libro de cuentos “Viajá conmigo”. En junio de 2014 ganó el 3° premio en el certamen literario nacional Paco Urondo y en septiembre Marcel Maidana Ediciones editó su eBook: “Fantasmas de otros”. En junio de 2019, su primer recital de poesía recibió un beneplácito del Concejo Deliberante de Córdoba por su aporte a la cultura. Ah, su amiga Emma Gunst (emmagunst.blogspot.com.ar) publicó tres de sus poemas en el blog que reúne a mujeres poetas de todo el mundo y de todos los tiempos.